El traductor traidor

Aquí hablaremos de títulos, principalmente de películas, que han sido mal traducidos, o tal vez traducidos de forma que merece algún comentario.

jueves, 26 de febrero de 2015

50 sombras de Grey


Título original: Fifty shades of grey (novela de E. L. James de 2011 y película de Sam Taylor-Wood de 2015, USA)

Pasamos de las películas clásicas  comentadas en entradas anteriores a la más rabiosa actualidad. El título de la archifamosa novela y película homónima Fifty Shades of Grey es un juego de palabras en el que grey es el color gris y también el nombre del protagonista masculino del relato. 

La palabra shade en su uso más extendido significa sombra; to be in the shade (y no in the shadow) significa estar a la sombra por oposición a to be in the sun, estar al sol. Pero, aplicado a un color, shade quiere decir tono o variante de ese color. Fifty Shades of Grey significa por lo tanto Cincuenta tonos de gris, que es un bonito título; la inicial mayúscula de Grey no rompe además la ambigüedad ni aclara que se refiere a un nombre propio, puesto que en inglés no es extraño poner nombres ni adjetivos sustantivados en mayúscula (de hecho, en este mismo título, la palabra Shade también aparece en mayúscula).

En español el juego de palabras es imposible salvo que se hubiera traducido el apellido del personaje principal y se hubiera llamado a la novela y a la película Cincuenta tonos de Gris. La traducción de apellidos no se suele considerar admisible, pero eso no es excusa para traducir shade por sombra ignorando los distintos matices de la palabra shade en inglés, que como hemos visto no significa sombra en este contexto, y dando lugar a un título tan flojo como Cincuenta sombras de Grey, carente del sentido que tenía en inglés. Lo correcto hubiera sido Cincuenta tonos de gris o bien Cincuenta tonos de Grey.

La primera de las dos opciones, dar preferencia al color y no al nombre propio, es la que han escogido en Italia (Cinquanta sfumature di grigio) y en Brasil (Cinquenta Tons de Cinza), mientras que han mantenido el nombre propio en el mundo francófono (Cinquante nuances de Grey) y en Portugal (As Cinquenta Sombras de Grey). En Alemania, curiosamente, han conservado el título en inglés pero eliminando el número (Shades of Grey).

sábado, 14 de febrero de 2015

Los 400 golpes

Título original: Les 400 coups (François Truffaut, 1959, Francia)


La opera prima de François Truffaut, Les 400 coups, fue algo así como el pistoletazo de salida de la nouvelle vague (nueva ola), la corriente que renovaría el cine francés y que se acabaría contagiando a muchos otros países de Europa. 

Los 400 golpes, su título español, traducido literalmente del francés, suena muy extraño en nuestro idioma, aunque probablemente tengamos que reflexionar para darnos cuenta porque estamos habituados a él. Pero suele ocurrir que pensamos que los títulos de las películas son metáforas, licencias poéticas sin significado real, palabras escogidas por su sonoridad, etc. cuando en realidad son perfectamente comprensibles en su idioma original y es una traducción inadecuada lo que las convierte en palabras huecas.

Este es uno de esos casos; aunque el comportamiento al borde de la delincuencia juvenil del pobre chaval protagonista le acarrea algún tortazo que otro, los golpes del título no van por ahí.  Golpe es la traducción más socorrida de coup, una palabra comodín en francés que sirve para denominar un montón de cosas: un coup de poing es un puñetazo, un coup de pied una patada, un coup de tonnerre un trueno, un coup de foudre un flechazo amoroso, un coup de canif una cana al aire, y muy largo etcétera. Un coup de canon es un cañonazo y por ahí nos empezamos a acercar al significado de Les 400 coups

Como otras frases hechas del tipo se armó la de San Quintín, faire les 400 coups viene de una anécdota de la historia, una batalla contra los protestantes en el siglo XVII en la que el rey Luis XIII asedió la ciudad de Montauban con 400 cañonazos para aterrorizar a la población. Con el tiempo la expresión faire les 400 coups de canon (disparar 400 cañonazos) se simplificó a faire les 400 coups, tomó un valor irónico y pasó a aplicarse a personas que hacen lo que quieren y no respetan las normas, especialmente a chavales que hacen muchas travesuras o a adolescentes y jóvenes que se dejan llevar por una vida desordenada de juergas variadas. Los 400 coups del título por lo tanto no son una referencia a golpes sino a las trastadas que va haciendo el joven protagonista. No existe un equivalente en español de esta expresión, pero Los 400 golpes es una traducción rápida fruto del desconocimiento del significado del título original y un nombre hermético, abstracto y poco sugerente.

El mismo error se produjo en inglés, italiano y portugués de Portugal. En Brasil en cambio la película se llamó Os incompreendidos, que no significa lo mismo pero al menos tiene algún sentido y permite intuir algo del contenido de la película. Resulta muy curioso el título alemán, Sie küßten und sie schlugen ihn, literalmente Le besaban y le pegaban, que tiene muy poco que ver con el original pero que sí transmite algo del tono agridulce de la película.

domingo, 8 de febrero de 2015

Instinto básico

Título original: Basic instinct (Paul Verhoeven, 1992, USA)

Instinto básico (1992) fue uno de los films más célebres, taquilleros y también polémicos de su tiempo. En España se optó por traducir su título inglés, Basic instinct, de forma literal mientras que en Hispanoamérica la película se llamó Bajos instintos.

Realmente ninguna de las dos opciones es acertada; el título latinoamericano tiene una clara connotación relacionada con la moral católica tradicional, según la cual los impulsos naturales del hombre, muy especialmente el sexual, son instintos bajos que deben ser reprimidos o dominados. Esa valoración moral puritana no está en Basic instinct, el nombre original de la película (se podría discutir si está en el guión), así que se podría decir que Bajos instintos es un título tendencioso que tergiversa el original al impregnarlo de una ideología muy concreta. 

Por su parte, el título español se limita a calcar el inglés sin valorar que en nuestra lengua se suele hablar de las necesidades básicas de las personas, pero no de los instintos básicos del hombre ni de ningún animal. Sí se suele hablar en cambio de instintos primarios en el mundo de la zoología o a veces de la antropología o la psicología, así que Instinto primario habría sido en principio el título de la película más correcto y próximo al sentido del original en español.

En Italia, Francia y Alemania se mantuvo el título de la película en inglés. Curiosamente en Brasil se denominó Instinto selvagem (instinto salvaje), título muy comercial pero tampoco fiel al original, y en Portugal Instinto fatal, que, además de introducir también un matiz que no está presente en inglés, coincidió con el de Fatal instinct, la parodia de esta y de otras películas del mismo género que se rodaría pocos años más tarde.

lunes, 2 de febrero de 2015

Ladrón de bicicletas


Título original: Ladri di biciclette (Vittorio de Sica, 1948, Italia)

Ladrón de bicicletas es uno de los títulos más célebres del neorrealismo italiano, una corriente que a su vez marcó el cine posterior a la segunda guerra mundial. Su título español tiene cierta miga porque el italiano es Ladri di biciclette, ladrones de bicicletas, en plural.

Podría pensarse que se trata de un error típico por desconocimiento del italiano, lengua en la cual los plurales no se forman con -s, sino con un cambio de la vocal final (ladri, ladrones, es el plural de ladro, ladrón) y de hecho este mismo fallo se ha dado también en alguna que otra película italiana más como El hada ignorante, aunque esa la dejaré para otro día.

La cuestión es que aquí no está muy claro que el cambio al singular no fuese intencionado, puesto que se trata de un título estrenado en España en pleno franquismo; la fuerte crítica social de la película no pasó desaparcibida para la censura, que intentó atenuar su potencial subversivo añadiendo una espantosa voz en off para edulcorar la desoladora escena final. Al emplear el plural en el título, De Sica convierte al protagonista en un símbolo de toda una clase social empobrecida a la que la miseria de la posguerra convertía en ladrones, mientras que el singular provocaría un cambio de matiz al hacernos pensar más en una historia individual no tan fácil de extrapolar al conjunto de la sociedad. ¿Error de traducción o censura? Cada uno puede pensar lo que quiera.

Los títulos de la película en inglés, portugués y alemán mantienen el plural, mientras que el francés está cambiado al singular al igual que el español.